miércoles, 30 de abril de 2014

Malezas resistentes: ¿DONDE ESTAMOS PARADOS?

La REM relevó las diez provincias agrícolas más importantes de Argentina para dar cuenta del avance de las especies con resistencia a herbicidas en el territorio productivo.

Compartimos todos los mapas.

Para acceder a los mapas, haga click en el llink: 

http://www.aapresid.org.ar/rem/mapa-de-malezas/

Echinochloa colona RG







lunes, 28 de abril de 2014

Malezas resistentes: alerta amarilla

Hirchsfeldia incanabiotipo sospechoso resistente a herbicidas inhibidores de ALS , se lo encontró en el suroeste de la provincia de Buenos Aires.

Es una maleza de distribución regional. Se la conoce vulgarmente como nabo, nabillo o mostacilla perenne y entra dentro de los vulgarmente conocidos como nabos amarillos, a diferencia del nabón o brasscicaseas, de flores lilas.

Alerta amarilla Hirchsfeldia incana

El biotipo bajo sospecha presentó fallas de control con herbicidas del grupo de los inhibidores de ALS, como el metsulfurón y otros similares, que son usualmente utilizados para controlarla sin inconvenientes. 

Esto se detectó en los partidos del suroeste de Buenos Aires, Coronel Dorrego, Coronel Suarez, Adolfo Alsina y Monte Hermoso por parte de Ramon Gigon de la Chacra Barrow, mientras que Mario Vigna, especialista de INTA Bordenave también se encuentra trabajando en esta problemática. 

Alerta amarilla Hirchsfeldia incana 2
Foto: Mario Vigna 

El mayor inconveniente que ocasiona esta especie de crecimiento invernal es en los cultivos de trigo y cebada, en los que frecuentemente se utilizan herbicidas del grupo de los ALS para controlarla junto a muchas otras malezas. Actualmente se está trabajando sobre estas poblaciones para determinar alternativas de manejo adecuadas.

Fuente: REM 

martes, 22 de abril de 2014

DIA DE LA TIERRA




CUIDEMOS LA TIERRA,
TRABAJEMOSLA CON RESPONSALIBILIDAD



lunes, 21 de abril de 2014

A embolsar que por acá no sale

El pésimo mantenimiento de los caminos rurales amenaza a la cosecha récord, los camiones no pueden ingresar a los campos y la soja queda en los lotes sin poder salir 

Ing. Agr. Hernán García Kairuz 
Redacción Chacra 


Como casi todo en nuestro país, recién cuando llega la cosecha se observan los grandes problemas de la infraestructura vial. En los puertos del Gran Rosario se ven largas filas de camiones cargados con una cosecha récord que es cada vez más difícil de transportar. 

Yendo hacia la fuente el panorama no resulta más alentador, los caminos rurales están en pésimo estado, salvo raras excepciones, y las últimas lluvias complicaron aún más la situación. Esto sucede porque el campo aporta sus impuestos en su gran mayoria al Estado nacional (80%) mientras que a los gobiernos provinciales y municipales solo le llegan una fracción del aporte agropecuario. 

El Ing. Santiago del Solar, de AACREA, compara la inversión en tecnología y maquinaria de última generación que se aplica en los campos mientras que “al otro lado del alambrado te encontrás con un zanjón por el cual tenés que sacar tu cosecha”. 

Hoy por hoy las lluvias demoran la cosecha en sí pero también complican la salida por lo que, según Del Solar, “la bolsa nos salvó la vida” ya que de otra manera mucho de los 54 millones de toneladas de soja estarían en el piso porque es un cultivo al que no se lo puede esperar. Esta tecnología permitió que se pudiera seguir cosechando muchísima superficie embolsando en el propio campo. 

Más allá de la situación per se, esto provoca mayores costos por más cantidad de viajes de los camiones y mayor gasto de combustible por las máquinas agrícolas. 

Hace unos días Luis Etchevehere se refirió a este tema diciendo que "a pesar de que el gobierno no ve la hora de que ingresen los dólares de la cosecha, no invirtió en infraestructura, y hoy, con estas lluvias no hay caminos para sacar la producción". 

Aun así, según un estudio de AACREA, el 40% de la soja a cosechar está comprometida con pagos de insumos y servicios y por esta razón no puede esperar en la bolsa tiempos mejores sino que debe venderse para pagar gastos. 

Consultado por CHACRA, Pablo Senioú de Ipesa Silo, afirma que “al día de hoy las ventas son similares a las del año pasado”. Aunque aclara que la demanda este año es inmediata (producto de una mayor oferta ya que no hay problemas de abastecimiento como en campañas anteriores), esto se suma a que el productor necesita la bolsa rápidamente debido a las ventanas más cortas de labor que tiene. Por esta falta de planificación en general creen que aumentará sensiblemente la venta en las próximas semanas. 

El fondo de la lata 
En el municipio de Rojas existe una resolución municipal del año 2002 que establece que el 80% de lo recaudado por la Red Vial debe ser ejecutado en obras viales en el partido. De esta manera se lograba una buena articulación entre municipio y productores ya que la gente del campo ayuda al mantenimiento de los caminos. 

Pero este año, ante una fuerte desfinanciación municipal, el ejecutivo rojense envió al Consejo Deliberante un proyecto para derogar esta resolución y así poder hacer uso del total de lo recaudado para gastos corrientes del municipio. “Esto sería catastrófico para el campo” afirma indignado Del Solar.

Fuente: REVISTA Chacra 

lunes, 14 de abril de 2014

Tips para cosechar en lotes embarrados

Ing. Agr. Hernán García Kairuz 

Con un 14% del área de soja cosechada, las lluvias generan interrupciones que dificultan la logística y comprometen la estructura del suelo por la compactación que provoca el tránsito de cosechadoras y tolvas. 


Por estas razones es conveniente tomar ciertos recaudos a la hora de entrar a cosechar lotes con excesos hídricos en los que, por alguna razón, no se puede demorar la trilla. 

El Ing. Agr. Marcos Formica destaca que, en soja, la ventaja de que la plataforma trabaje apoyada en el suelo hace que la máquina se encaje menos por la mejor distribución del peso entre la plataforma y los dos ejes de la cosechadora. 

En este sentido, Formica asegura que es importante tener en cuenta que “cuando se da la vuelta en la cabecera no hay que levantar la plataforma ya que, de hacerlo, se transfiere el peso a los ejes y la máquina se encaja aquí”. 

Además es aconsejable trabajar con orugas en los ejes anteriores y con ruedas de alta flotación en el eje trasero ya que “es común que en la máquina con orugas se encajen las ruedas traseras” precisa el gerente técnico de Mainero. 

Otra opcion es utilizar rodados de estructura radial. Estos se han impuesto vs. los neumáticos convencionales, entre las preferencias de los usuarios, debido a sus prestaciones –a igualdad de otros aspectos tales como dimensiones de los rodados, condiciones de piso, peso sopotado--. Esta ventaja de los radiales de aumentar la superficie de contacto con el suelo que brinda mayor flotabilidad, se acrecienta a medida que empeoran las condiciones de suelo. 

Por otro lado, el draper resulta sumamente ventajoso frente a la plataforma con sin fin debido a que “se puede cosechar por más horas” sin problemas. El problema que se puede generar en tipo de plataforma es que las malezas tipo gramilla atasquen el rolo de mando, “pero esto pasa muy ocasionalmente, y si sucediera, la plataforma con sin fin ya hubiese dejado de trabajar hace horas" especifica el especialista. 

¿Y en maíz? En el cereal se recomienda la oruga y las ruedas de alta flotación ya que, como el cabezal va “colgado” constantemente, la transferencia de peso hacia los ejes es inevitable por lo que todo lo que se pueda hacer para aumentar la superficie de pisado de las ruedas y orugas mejora sensiblemente la operación. La ventaja del maíz es que como la espiga esta a una buena altura del suelo, se puede cosechar aun en situaciones de anegamiento por lo que es importante tenerlo en cuenta para priorizar lotes de soja o maíz. 

Fuente: Revista Chacra

Científicos obtienen leche funcional de cabra

Científicos obtienen leche funcional de cabras A partir de la alimentación estratégica de cabras con semillas de chía de descarte, investigadores del INTA obtuvieron leche con alto contenido de ácidos grasos beneficiosos para la salud humana. 

En el NOA, es habitual ver cómo los productores buscan alternativas más baratas que el grano de maíz para la alimentación de sus animales. En la región, la chía destinada para el descarte surge como un suplemento para los rumiantes. Un ensayo exploratorio, publicado en la Revista RIA, determinó que la incorporación de esta oleaginosa no sólo mejoró la nutrición de los animales, sino que además, generó una leche con beneficios para la salud humana. 

Marcela Martínez, especialista en cabras del INTA Salta y a cargo de la investigación, destacó el potencial de este trabajo. “Lo que se obtuvo en un ensayo con semillas destinadas a descarte es muy bueno. Por esto, ahora queremos ver cuáles son los resultados si alimentamos a las cabras con chía pura porque no sabemos si pueden ser mucho mejores”, señaló. 

De acuerdo con Martínez, los ácidos grasos asociados a beneficios para la salud humana, el Ácido Vaccénico (AV) y el Linoleico Conjugado (CLA), se incrementaron en un 133 y 97 por ciento, respectivamente. “¿Cuánto lograríamos aumentarlos con semilla pura?”, se preguntó la investigadora. 

“La suplementación permitió aumentar el contenido graso de la leche, a muy bajo costo y sin presentar alteraciones en la producción ni en el contenido de proteínas y lactosa”, resaltó Martínez y agregó que “ese incremento se vio acompañado por un cambio en el perfil en de la leche: los considerados como ‘malos’ para la salud humana disminuyeron y los ‘buenos’ aumentaron”. 

La semilla de chía es un gran aliado para la digestión. Además, es una de las especies vegetales con la mayor concentración de ácido graso alfa-linolénico omega 3, que ayuda a controlar el colesterol y la presión alta. 

El suplemento con el que se alimentó a las cabras tenía un 50 por ciento de semillas de chía y el resto de semillas de maleza que, tras estudiarlas, comprobaron que no eran tóxicas para los animales. Según consideró Martínez, si bien los costos de la dieta con este grano pueden elevarse considerablemente, “es necesario conocer el potencial de la oleaginosa para saber cuán cerca o distante se está al utilizar semillas descarte”. 

La investigadora del INTA Salta observó que la chía, además de ser “la fuente vegetal con mayor concentración de ácido linoleico”, tiene “muy buena palatabilidad” para el rebaño caprino, lo que la convierte en una opción casi gratuita al descarte para suplantar granos que tienen costo, como el maíz. 

“El descarte de chía se podría llegar a vender pero hoy no tiene un mercado; hoy la regalan. Eso, sumado a la buena aceptación por parte de las cabras, hacen de este subproducto una alternativa para suplantar a otro grano en la alimentación”, aseguró Martínez. 

Por ejemplo, en lugar de alimentar al rebaño con toda la ración de maíz que le corresponda por nutrición, se puede reemplazar la mitad por esta oleaginosa que hoy se entrega gratis. Entonces, bajan los costos de suplementación y aumentan las grasas (sin disminuir el contenido proteico de la leche) y, por lo tanto, los rendimientos queseros que generen. 

Es que las propiedades que genera la chía sobre la leche caprina pueden trasladarse a sus productos derivados (como los quesos) ya que los productores caprinos del norte argentino no suelen consumir leche cruda sino que consumen o venden queso. 

“Además de que estas propiedades benéficas para la salud humana se puedan transferir en el queso, podría aumentar los rendimientos para ese sector productivo en una zona en la que el cultivo de chía es cada vez mayor y no se sabe qué hacer con los descartes”, concluyó Martínez quien adelantó que trabajará junto a investigadores del INTA Salta en un panel sensorial para evaluar si los quesos con leche funcional de chía de descarte podrían ser aceptados por los consumidores. 

El ensayo publicado en la Revista RIA es el primero de su clase en el mundo ya que no hay antecedente de alimentación de rumiantes con chía. 

Fuente: INTA Informa

viernes, 11 de abril de 2014

Limpieza de pulverizadoras

Cómo limpiar las pulverizadoras para evitar contaminación del ambiente y de cultivos 

Sin título

Compartimos tips para tener en cuenta de la mano de Balestrini S.A. 

 Descargá el documento haciendo click aquí 


Fuente: Aapresid 

jueves, 10 de abril de 2014

Situacion extrema en la Ruta 188

Ruta 188, cortada. 

Finalmente lo que muchos suponían sucedió ya que cedió el asfalto en el tramo entre los kms. 402 y 403 dado los desmoronamientos producidos por el avance de las aguas del Río Quinto. 


Tal cual lo anticipábamos el corte en la ruta 188 es total y por tiempo indeterminado. Para que puedan pasar algunas personas a pie a su lugar de trabajo se ha improvisado un puente de chapón que se observa a la izquierda de la foto. 

Quienes deban viajar hacia La Pampa deberán desviar en Gral. Villegas hacia la ruta 33 hasta ruta 70 a la altura de América y de allí a ruta Nº 1 para retomar la 188 con destino al oeste y quienes viajen a la Provincia de Buenos aires deberán invertir el camino descrito anteriormente. 

Fuente: Banderalonoticias.

A pensar en el barbecho

El barbecho es una oportunidad para acumular recursos y modificar propiedades del suelo para beneficio del cultivo siguiente. En siembra directa, en el barbecho se concentran mayormente decisiones relacionadas al manejo de las malezas. ¿Cuando intervenir sobre las malezas? ¿Con qué hacerlo? ¿De qué modo? Son algunas de las preguntas que suelen aparecer. 

Durante el barbecho, las malezas pueden consumir recursos (agua, nutrientes) reduciendo su disponibilidad para el cultivo; pero también pueden encontrar espacios para su multiplicación, crecimiento y persistencia dificultando el manejo posterior de esos lotes. 


Es por esto que la planificación del barbecho tiene influencia directa en la presencia y evolución de muchas malezas, varias de ellas problemáticas. En los últimos años han aparecido a lo largo y ancho del país distintas malezas tolerantes o resistentes a los herbicidas y/o a las estrategias de control que solíamos utilizar. La aparición de estas malezas fue resultado, en gran parte, de cómo diseñamos los sistemas productivos, más allá de la planificación del manejo y control de las mismas. 

La desaparición de siembras invernales y la tendencia a la homogeneización y simplificación del manejo sin dudas jugaron un rol clave. En muchos casos, donde predominó la tendencia a la monocultura (con consecuente disminución de rotación de cultivos) y las estrategias de control de malezas estuvieron apoyadas en uno o pocos herbicidas (con consecuente falta de rotación de modos de acción) se reportan hoy problemas de malezas. La aparición de malezas de difícil control cambió el propósito que originalmente tenía el barbecho. Al planificar el barbecho se solía decidir sobre las malezas en relación a su impacto en la reducción de recursos. Las decisiones se apoyaban en preguntas tales cómo ¿Cuán infestado está el lote?, ¿Cuánto podrían crecer las malezas? ¿Cuántos recursos capturarían? Entonces… se decidía cuándo y cómo controlarlas. 

Actualmente, esta idea del manejo de barbechos se ha integrado a la necesidad de prevenir la instalación y evolución de las malezas de difícil control. ¿Qué especie tengo? ¿En qué estado están? Son nuevas preguntas que alimentan nuestras decisiones. Es decir, con presencia de malezas de difícil control, el manejo del barbecho es una oportunidad no sólo para evitar el consumo de recursos, sino para evitar o reducir la presencia de esas malezas que en el siguiente cultivo dificultarán y encarecerán el control, además de reducir pérdidas por competencia, reduciendo el resultado. 

Suelen indicarse tres momentos del ciclo de las malezas particularmente sensibles a su supervivencia. El primero es durante el establecimiento de las malezas (desde la germinación hasta la plántula), momento en el que puede ser más fácil controlarlas. El segundo es durante su crecimiento, relacionado a su capacidad para competir. En este momento los controles son muy variables dependiendo de aspectos de la maleza (su estado fenológico, condición de crecimiento, tamaño, etc.) y del control (tipo de herbicida, selectividad, movimiento en la planta, etc.). El tercero es al final del ciclo de las malezas -en coincidencia con la cosecha del cultivo-, momento en el que podemos evitar su distribución espacial (aunque en este caso la malezas están establecidas y seguramente compitieron con el cultivo). 

El barbecho es una excelente oportunidad para el evitar el establecimiento de malezas y su progreso a estados de mayor dificultad de control asociados a su tamaño, morfología, función etc. Una parte importante del problema de malezas de difícil control se resuelve entonces actuando a tiempo. Por este motivo, tres conceptos son clave en el manejo del barbecho de la agricultura actual: 

(1) planificar el barbecho desde muy temprano, incluso desde antes de cosechar el cultivo anterior. El viejo modelo de comenzar a pensar en control de malezas a la salida de invierno o en primavera ya no es posible en la realidad actual de los sistemas; 

(2) diagnosticar la situación del barbecho con su monitoreo temprano y continuo. Es decir, hacer un seguimiento periódico y preciso de la presencia de malezas desde el momento en que se cosecha el cultivo anterior; y 

(3) actuar con las herramientas planificadas disponibles para un resultado eficaz y eficiente. 

La estrategia de barbecho más adecuada para cada lote dependerá de varios factores, usualmente considerados en los puntos (1) y (2): cultivo a sembrar, genética a sembrar (por ejemplo RR, STS, CL), tipo y estado de malezas presentes, productos disponibles y precios, etc. 

Claramente, el producto herbicida es uno más de varios factores. A diferencia de las estrategias usadas años atrás, el hecho de planificar los barbechos desde temprano, da la posibilidad de incorporar algunos herbicidas residuales. En las condiciones actuales, los productos residuales son una herramienta indispensable para lograr buenos controles de algunas malezas difíciles, evitar el establecimiento de las mismas (anticiparse al problema) y disminuir número de aplicaciones reduciendo los costos. Disponemos de múltiples herbicidas y principios activos para el control que, junto con diferentes momentos de intervención, resultan en un gran número de posibles estrategias. No es nuestro objetivo analizar todas y cada una. 

Sólo a modo de ejemplo, en un lote en el cual se sembrará soja podrían hoy plantearse 3 momentos clave de evaluación y posible control y diferentes productos según el tipo y estado de malezas presentes (la figura 1 resume el ejemplo): · Otoño (Abril - Mayo): El primer momento clave es luego de la cosecha del cultivo anterior ya que es la primera oportunidad de iniciar el control. Independientemente del nivel, si en este momento el lote tiene malezas, éstas deben controlarse. Si el nivel de enmalezamiento es incipiente (no hay efecto “paraguas”) podría incluirse, junto a herbicidas de acción directa, un producto residual (por ejemplo inhibidor de ALS) para mantener el lote limpio durante el invierno. Si hubiese nacimientos anteriores (por ejemplo primeras cohortes de rama negra) podría analizarse la inclusión de herbicidas disruptores de crecimiento. Si el nivel de enmalezamiento fuese alto, la estrategia se orientaría a controlar las malezas presentes evitando residuales, por el efecto paraguas. 

Salida del invierno (Julio - Agosto): Es un segundo momento clave ya que comienzan a aparecer activamente las malezas. La estrategia a usar puede depender de lo realizado en otoño y de la variedad a sembrar (por ejemplo STS). Si la estrategia de otoño fue efectiva, no debería haber rama negra instalada anteriormente. Si la hubiese, la estrategia debería orientarse a controlar la misma (por ejemplo con la inclusión de disruptores del crecimiento o productos específicos de acción directa para su control). A esta altura, algunos productos de acción residual deben evitarse para no generar fitotoxicidad al cultivo (por ejemplo algunos inhibidores de ALS). Sin embargo, cuidadosamente podrían usarse otros residuales de diferente modo de acción (por ejemplo inhibidores de fotosíntesis). 

Primavera – Pre-siembra (Septiembre - Octubre): Es el tercer momento clave para el monitoreo y control ya que de esta intervención depende llegar sin malezas a la siembra, algo altamente deseable. Además, hay camadas de emergencia de malezas, entre ellas algunas problemáticas (por ejemplo rama negra). El rango de productos a usar es más restringido. Dependiendo del tipo y estado de malezas presentes, el control puede ser simple con herbicidas de acción directa (por ejemplo glifosato). Deben usarse con especial cuidado los disruptores del crecimiento y el uso de residuales está restringido sólo a productos específicos recomendados en la presiembra del cultivo (inhibidores de la ALS específicos). Aunque el ejemplo plantea tres oportunidades de diagnóstico y acción, no necesariamente significa que se van a controlar malezas en los tres. El número de intervenciones dependerá del diagnóstico en cada momento y de los objetivos de la planificación. El otro nuevo concepto que impone el manejo de barbecho es que cada lote es una situación singular (dependiendo de su historia, cultivos, manejos, etc.) que merece un detallado análisis. Durante la campaña pasada muchas empresas convivieron con situaciones de una, dos o tres aplicaciones en barbecho de lotes destinados a siembra de soja. 

Las malezas se adaptan a nuestros manejos para sobrevivir. 
No tendremos soluciones permanentes, pero el barbecho es una oportunidad para intervenir y reducir el impacto de las malezas, principalmente de las problemáticas. Sin embargo, no sólo del barbecho depende el destino de las malezas; otras múltiples decisiones asociadas al diseño del sistema productivo (rotaciones, intensidad de uso de la tierra, proceso de cosecha, etc.) también condicionan su presencia. De manera resumida, parados en un lote, se refuerza la necesidad de comenzar a pensar el barbecho desde temprano y en base a un constante monitoreo. Las estrategias, los productos y los momentos de intervención son importantes, pero serán aliados agregando valor si responden a una planificación temprana y a decisiones apoyadas en un diagnóstico continuo. De otro modo, es posible que incrementen nuestros costos, con resultados variables y, por qué no, se conviertan en parte del problema que pretendemos resolver o la raíz de otros nuevos problemas. 


Por Federico Bert y Emilio Satorre. Revista Chacra

martes, 8 de abril de 2014

Sin caminos, difícil sacar la cosecha (y los dólares que espera el Gobierno)


Etchevehere: “A pesar de que el Gobierno espera los dólares de la cosecha, no hay caminos para sacarla”

“A pesar de que el gobierno no ve la hora de que ingresen los dólares de la cosecha, no invirtió en infraestructura, y hoy, con estas lluvias no hay caminos para sacar la producción”, señaló Luis Miguel Etchevehere, presidente de la Sociedad Rural Argentina (SRA), en relación al estado lamentable de los caminos y su anegamiento a raíz de las lluvias, justo cuando se espera una cosecha de soja de más de 50 millones de toneladas, cuyo traslado requerirá más de 3 millones de viajes de camión. 

“En estos diez años, el gobierno tuvo el dinero y el poder para hacer las obras necesarias. Sin embargo, el estado de los caminos es deplorable”, sentenció Etchevehere, y agregó: “Este profundo retraso en materia de infraestructura contrasta fuertemente con lo que es hoy el campo argentino: un sector dinámico, innovador, moderno y generador de tendencias a nivel mundial”. 

En la actualidad, el campo tiene una presión impositiva 58% más alta que la del resto de los sectores de la economía. Sin embargo, no se percibe un retorno en materia de servicios públicos. Por el contrario, se mantiene un sistema abusivo de retenciones y de intervención de los mercados que provocaron una gran pérdida de competitividad al sector agropecuario. 

La falta de inversión en infraestructura vial y el estado deplorable de los caminos y rutas provoca un importante aumento de costos. Hoy, la mínima caída de lluvia bloquea la entrada y salida de los campos, demora excesivamente la cosecha y esto, a su vez, determina una pérdida de producción. Estas situaciones se agudizan a medida que aumenta el volumen de las lluvias.

Durante estos años de excesiva presión impositiva, el Gobierno tampoco creó las condiciones para que se pudiera desarrollar un seguro multi-riesgo que preserve al productor de los fenómenos naturales cada vez más extremos y recurrentes. 

“Esta es una prueba más de la ausencia del Estado que perjudica la actividad productiva. Pero esto no es sólo en materia de infraestructura, sino también en seguridad, educación y salud, otros ejemplos que afectan al productor agropecuario, alejado de los grandes centros urbanos, pero también al resto de la sociedad”, lamentó Etchevehere.

Fuente: Sociedad Rural Argentina 

viernes, 4 de abril de 2014

En esta campaña, con buenos rinde ya no alcanza

Según la última Encuesta de Percepciones y Expectativas realizada por los Consorcios Regionales de Experimentación Agrícola (CREA) en distintas provincias argentinas sobre la campaña 2013/2014 advierte que sin bien la soja se recuperó en gran medida luego de un mal comienzo, dejará poco saldo para encarar el nuevo ciclo. 



CREA informó que la campaña de granos gruesos 2013/14 se encuentra en un estado avanzado y permite avizorar algunas tendencias firmes. 

Las sojas de primera y de segunda se recuperaron en gran medida luego de un mal comienzo y podrán alcanzar rindes cercanos a los planificados en todas las regiones productivas, excepto en el sudoeste bonaerense. 

En cambio, los maíces tempranos darán lugar a rendimientos menores a los planificados en todas las regiones, mientras que en los tardíos se da la situación contraria, con perspectivas de rendimientos muy satisfactorios. 

No obstante, estos buenos resultados productivos que se esperan si el clima no compromete la evolución de los cultivos tardíos, no garantizan un resultado económico satisfactorio para los productores por los aumentos de precios de los insumos y por costos de financiación en línea con la inflación. 

En ese sentido, cabe aclarar que la producción comprometida para cubrir los costos en los dos meses siguientes a la cosecha alcanza al 57% en girasol, al 40% en soja y 28% del maíz. 

Resultados declinantes 
El 58% de los que contestaron la encuesta indicó que sufrió un deterioro del resultado económico en las empresas en el último año. A partir de ese escenario, la principal medida adoptada fue la postergación del crecimiento, aunque también se concretaron reducciones de retiros y liquidaciones de capital. 

Por otro lado, un porcentaje mayoritario de los que respondieron la encuesta estima que, para la campaña 2014/15, se requerirá un aumento de capital operativo valuado en dólares del 11% para desarrollar actividades agrícolas, del 10% para ganadería de carne y del 14% para tambo respecto del ciclo previo. Las mayores necesidades de capital deberán satisfacerse con financiamiento. 

En ese sentido, el 40% de los empresarios agrícolas estimó que deberá solicitar crédito para más del 40% de los costos de implantación de los cultivos; el 24% necesitará financiar más del 50% de los gastos y sólo el 11% no requerirá financiación con ese propósito. 

En ese contexto de números ajustados, el 53% de los consultados indicó que el actual es mal momento para realizar inversiones en el campo. Estas expectativas muestran un deterioro del clima de negocios respecto de la encuesta anterior, realizadas en noviembre de 2013 (gráfico 1). 

Gráfico 1. Momento para realizar inversiones
Encuesta CREA


Siembra de trigo 
En una situación de liquidez escasa, cobra importancia la siembra de granos finos. En la encuesta CREA, la intención de siembra 2014/15 indica un aumento en la superficie de cultivos de invierno respecto de la campaña anterior, con un crecimiento del área de trigo del 17%. 

Este cultivo constituirá el 76.4% de la superficie destinada a cosecha fina entre los participantes del relevamiento. La cebada perderá terreno por su mal resultado en 2013 ocupando el 16.3%, lo mismo que el garbanzo, con el 1.2%. 

La colza no superará el 1.4%. La principales razones que impulsan la siembra de trigo son “necesidades de la rotación”; “margen esperado” y “clima favorable para su implantación”. 

Ganadería 
Según el relevamiento realizado por CREA, en la actividad “Cría” el 55% de los productores mantendrá su stock bovino, el 37% lo aumentará y el 8% lo disminuirá. 

Con respecto a la oferta global de carne vacuna en el nivel nacional, el 61% de los entrevistados considera probable que se mantenga constante, mientras que el 23% estima que aumentará. 

Por su parte, el 45% de las empresas lecheras relevadas considera que el nivel de deuda actual es superior al habitual para este momento del año. El 66% no modificará el modelo productivo, mientras que el 34% que prevé aumentar la producción de leche en el tambo en 2014 recurrirá a mayor carga animal y producción individual. 

Expectativas macroeconómicas 
Con respecto a la evolución actual y futura de la economía, el 71% de los participantes del relevamiento afirmó que tiene una percepción de que la situación económica del país es peor que hace un año, mientras que el 56% expresó una expectativa que dentro de 12 meses será peor que ahora. 

Metodología 
La encuesta de expectativas CREA se realizó desde 5 al 24 de marzo de 2014 y fue respondida por 731 miembros CREA y 190 asesores distribuidos en distintas provincias argentinas. Se realiza en marzo, julio y noviembre de cada año.

Fuente: Diaz de Campo

jueves, 3 de abril de 2014

Granos de destilería, más nutrición y valor agregado

Este subproducto del bioetanol de maíz es una nueva alternativa sustanciosa y hasta un 10% más económica para alimentar ganado. Agregado de valor en origen para una industria en auge. 

Granos de destilería, más nutrición y valor agregado


El aumento al 6,6% del corte con etanol de las naftas consumidas y las estimaciones de un crecimiento al 10% para 2014, mejora el escenario para la producción nacional de bioetanol y, con ello, el aumento de oferta de los subproductos. Así, los granos de destilería o burlanda –DGS, por sus siglas en inglés– surgen como una alternativa económica y nutritiva para alimentar al ganado. El 9 y 10 de abril los especialistas compartirán más información en la 5ª Jornada Nacional de Forrajes Conservados en el INTA Manfredi, Córdoba. 

“Nuestro país, deficitario en energía, importa combustibles fósiles y exporta maíz sin transformar”, indicó Mario Bragachini –especialista del INTA Manfredi–, por lo que ponderó la oportunidad que implicaría agregar valor al grano al sustituir las importaciones, generar trabajo en origen e incentivar a las producciones pecuarias, cercanas a las plantas de etanol, a ofrecer DGS a un precio muy competitivo para los productores ganaderos. 

“Además, –aseguró el técnico– la Argentina cuenta con un excedente en biomasa vegetal que debe aprovecharse a partir de la producción de agroalimentos y bioenergía estratégica en origen”, y estimó que en 2014 nuestro país podrá moler 1,5 millón toneladas de maíz, lo que generará unas 450.000 tn de DGS en seco con lo que se podrían alimentar unas 411.000 vacas lecheras por año. 

En esta línea, el Plan Estratégico Agroalimentario y Agroindustrial del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación, indicó que la producción de grano de maíz pasará de las 28 millones de toneladas, obtenidas en la campaña 2012/13, a 55 M/tn en 2020, lo que permitirá moler hasta 10 M/tn para etanol. 

Las perspectivas para la industria del bioetanol son promisorias y en este contexto Bragachini aseguró que “nuestro país puede moler maíz, hacer etanol y agregar valor en origen en otros procesos industriales, sin afectar la disponibilidad ni los precios internos de este grano, al utilizar parte del saldo exportable”. 

Como subproductos de la industria del bioetanol se obtienen los granos destilados de maíz 
conocidos como burlanda seca o húmeda con solubles (DDGS y WDGS, respectivamente por sus siglas en inglés). 

Más nutrición, menos costo 
Como subproductos de la industria del bioetanol se obtienen los granos destilados de maíz conocidos como burlanda seca o húmeda con solubles (DDGS y WDGS, respectivamente por sus siglas en inglés), utilizados como alimento para el ganado por su riqueza en nutrientes y proteínas. 

Se trata de un producto de excelentes cualidades ya conocido y utilizado en otras partes del mundo, como Estados Unidos. “La clave para la Argentina está en saber adaptase e implementar su uso que, en algunos casos significará una baja del 10% en el costo de la ración”, aseveró Nicolás DiLorenzo, ingeniero agrónomo argentino y profesor de la Universidad de Florida, Estados Unidos. 

En relación a otros suplementos, este subproducto es un concentrado proteico y, al mismo tiempo, energético con un alto contenido de grasa o aceite y hasta tres veces más de proteína bruta (30%) comparado con el grano de maíz. Además, presenta una alta palatabilidad para el ganado bovino. 

Asimismo, el especialista radicado en Estados Unidos recomendó no exceder los niveles máximos de inclusión, para no generar ningún exceso en las dietas de los animales, ya que estos subproductos poseen tres veces el valor de minerales contenidos en el grano de maíz. 

Para ello, explicó que la inclusión óptima en tambo de los DDGS es de entre un 15 y 25% mientras que en los feedlots el porcentaje asciende a 30 y 40% de la materia seca total. En cuanto a la alimentación de cerdos se recomienda hasta un 10% en etapa de crecimiento, un 15% en engorde y un 7% en lactancia. Por su parte, se estima hasta un 8% en pollos y un 15% en crecimiento y engorde. 

 Bragachini aseguró que “nuestro país puede moler maíz, hacer etanol y agregar valor en origen, sin afectar la disponibilidad ni los precios internos de este grano, al utilizar parte del saldo exportable”. 

Más valor en origen 
Más del 64% del total de maíz producido en el país –18 millones de toneladas– se exportaron como grano con bajo valor agregado y con ello litros de agua dulce, nutrientes del suelo y muchas posibilidades de trabajo genuino en origen. 

Para Bragachini, “la biomasa, sin dudas, es una alternativa que, con la tecnología actual y el valor del petróleo, hace posible, rentable y estratégica la elaboración de bioenergía en origen”. 

Una cuestión de humedad 
Este subproducto del bioetanol de maíz viene en dos presentaciones: húmedo o seco (WDGS ó DDGS, respectivamente por sus siglas en inglés). En el primer caso, tiene un 35 % de materia seca mientras que en el segundo es de 90 %. 

“En su formato húmedo, –indicó Bragachini– es un producto difícil de manejar porque su consistencia (parecida a la de un puré) plantea un desafío en su almacenamiento, suministro y transporte. La alterativa es el DDGS que se vende a granel y es similar a la harina”. 

Fuente: INTA Informa 

Alerta por dos focos de Roya

Uno se detectó en el centro de Santa Fe y el otro en el centro-sur de Entre Ríos, indicó el INTA Pergamino.  


Las condiciones ambientales actuales son favorables para la dispersión de las esporas. Ante esta situación, se recomienda intensificar el monitoreo de los lotes, observándolos cada dos o tres días, y evaluando sobre todo las plantas en sus hojas basales. 

Los síntomas comunes se visualizan mayormente en el envés, se producen lesiones de color amarillo que posteriormente se tornan marrón y marrón-rojizo. 

 El mayor efecto negativo de la enfermedad sobre el cultivo se relaciona con la madurez anticipada y la baja en el rinde. 

Con altas temperaturas y tiempo seco, la evolución de la enfermedad es más lenta.

martes, 1 de abril de 2014

El ataque a las malezas debe darse a tiempo

En Tala Pozo, Burruyacu, se mostraron los resultados de trabajos para el manejo con un biotipo resistente, para la especie Urochloa panicoides. 

“La pérdida del glifosato como herramienta de enorme flexibilidad contra las malezas nos ha hecho regresar a manejos más precisos, en los que recobra importancia el factor tiempo: para ser eficiente un herbicida debe emplearse dentro de una determinada ‘ventana de aplicación’ (momento adecuado)”, señaló Sebastián Sabaté, de la Sección Malezas de la Estación Experimental Agroindustrial Obispo Colombres (Eeaoc). 

Fue en el marco de una jornada realizada por esa Sección, que dirige el ingeniero Ignacio Olea, en Tala Pozo (Burruyacu), donde productores zonales de soja y maíz pudieron apreciar los resultados de trabajos para el manejo con un biotipo resistente, para la especie Urochloa panicoides, gramínea que ahora se suma a la Echinochloa colona, con la que la Eeaoc viene trabajando hace unos años. 

En la introducción, Olea señaló que dentro de los biotipos resistentes a glifosato en Tucumán figuran gramíneas -Sorghum halepense, Echinochloa colona, Eleusine indica y Urochloa panicoides- y una latifoliada (Amarantus palmeri). 

¿Qué implica que esas malezas sean resistentes a glifosato? 
 -Que hay que trabajar con herbicidas alternativos, sumándolos al glifosato o usándolos en reemplazo de aquél. Necesitamos estar atentos para comprobar, ahora que termina la campaña, si nuestro campo presenta esta problemática, y su impacto en cada lote. 
En base a esto, habrá que trabajar para la siguiente campaña, atentos al momento en que emergen las malezas. Este factor constituye uno de los principales inconvenientes debido a la variabilidad climática que venimos experimentando, ya que las primeras camadas pueden aparecer en octubre, noviembre o diciembre, según la cantidad de lluvias que normalmente disparan la germinación de esas especies. 

VERIFICACIÓN A CAMPO. Los productores zonales de soja y de maíz recorren los lotes en Tala Pozo, para observar los ensayos contra malezas resistentes.
VERIFICACIÓN A CAMPO. Los productores zonales de soja y de maíz 
recorren los lotes en Tala Pozo, para observar los ensayos contra malezas resistentes. 

¿Cómo se procede a identificarlas? 
Tras haberse aplicado un barbecho con glifosato un biotipo resistente se verá afectado hasta cierto punto, pero no manifiesta los síntomas típicos y produce rebrotes de manera rápida. Esos rebrotes, libres ya de cualquier competencia de otra maleza, experimentan un crecimiento explosivo. 

¿Qué distribución tiene Urochloa? 
Hasta donde sabemos está en Tucumán, y aún no tenemos referencias de su distribución a nivel país, donde ya son siete los biotipos de malezas resistentes a glifosato y año tras año van apareciendo nuevos. Hay que estar muy atentos. Los cambios en el manejo de una maleza (rotación de herbicidas) son importantes no sólo para ella sino para prevenir la aparición de otras resistencias. En lugar de confiar sólo en el glifosato para el control de las malezas, se hace necesario complementarlo. Es lo que llamamos “manejo consciente” de las malezas. 

Experiencias en el campo 
“Hemos realizado las primeras experiencias a campo para el manejo de Urochloa y queremos que la gente conozca algunas conclusiones preliminares. En estos últimos tiempos, además, fenómenos como la sequía generan resultados diferentes comparados con los de épocas normales”, remarcó Sabaté. 

Entre otros experimentos, los asistentes -entre ellos técnicos de campo y también representantes de firmas productoras de herbicidas- pudieron observar in situ la respuesta de Urochloa panicoides a glifosato y cletodim (solo y en mezcla con glifosato); alternativas de barbecho químico anticipado con herbicidas residuales para el manejo de esa gramínea, y otros con la maleza ya emergida y otros con herbicidas residuales en pre-emergencia de soja y maíz con rebrotes de gramíneas resistentes. 

“Una de las principales conclusiones de nuestras investigaciones es que resulta difícil controlar los biotipos resistentes de las gramíneas anuales cuando ya emergieron y adquirieron cierto tamaño, y dado que su capacidad de rebrote es muy alta, competirán mucho con el cultivo, sobre todo en los momentos críticos que comprenden los primeros 15 o 20 días después de la siembra. 

Por ese motivo, estamos desarrollando la aplicación de los herbicidas residuales antes de la emergencia de la primera camada de estas especies y estamos encontrando resultados prometedores”, afirmó el especialista. 

Advirtió el investigador que si se falla en el barbecho, suele ser bastante complicado manejar la post emergencia de la maleza. “Hay que ser lo más eficiente posible utilizando los herbicidas graminicidas (fop y dim), los cuales demandan condiciones ideales para ser efectivos. 

Es mejor no mezclarlos con otros herbicidas, por caso, y funciona mejor antes de que la maleza florezca. Hay que monitorear los campos y si hay rebrotes deben hacerse manejos a tiempo”, apuntó el profesional. 

Algunas de las conclusiones presentadas a los asistentes de la jornada fueron: 
 * hay herbicidas totales flexibles como el glifosato que aseguren eficiencia en el barbecho químico de plantas emergidas, considerando la diversidad de tamaño de las gramíneas, camadas y condiciones ambientales; 
 * la utilización de herbicidas residuales aplicados en barbechos preventivos podría ser la principal alternativa de manejo de gramíneas anuales resistentes a glifosato; 
 * es necesario precisar el momento para la aplicación de éstos, los períodos de protección y la eficiencia de los herbicidas aptos para cada biotipo; 
 * ciertas mezclas de herbicidas en barbecho pueden ser incompatibles, por lo cual no deben ser utilizadas; hay que informarse adecuadamente; 
 * se debe contemplar el uso de mezclas residuales de amplio espectro para controlar no solo las especies resistentes, sino también a la mayoría de las especies presentes en el lote; 
 * los graminicidas deben aplicarse en el momento adecuado para asegurar su efectividad.

Fuente: REM